Con la lectura oficial de su carta de renuncia, el exdefensor del Pueblo, Jorge Armando Otálora, confirmó su salida tras el escándalo que se desató por las denuncias de acoso laboral y sexual en su contra. 

"Lamentablemente, un artificial escándalo mediático puesto en marcha en mi contra en las últimas semanas, a través de verdades a medias -hábil y perversamente manipuladas- pretende empañar no sólo mi nombre y mi trayectoria profesional, sino que amenaza de manera grave con afectar el desempeño de la institución", se llee en la carta. 

En la lectura de su renuncia irrevocable, Otálora calificó como una paradoja el hecho de que, pese a desempeñarse en un cargo que vela por la protección de los derechos fundamentales, ahora deba resignarse al "sacrificio de los derechos tan elementales y sagrados como mi intimidad, el debido proceso y la presunción de inocencia". 

"No obstante, tengo claro que las instituciones están por encima de los intereses individuales y que la labore que me propuse realizar como Defensor del Pueblo afortunadamente ya está cumplida". 

La carta de renuncia irrevocable está dirigida al presidente de la Cámara de Representantes, Alfredo Deluque Zuleta.